17.12.11

Mi felicidad se debía a la tuya.

Estaba dispuesta a dejar todo. Ya no me importaba si me querías, si me necesitabas o si me odiabas. Si a vos te pasaba algo, yo iba a estar allí sosteniendo tu cabeza y diciéndote que todo estaría bien. ¿Qué ilógico no? Mientras yo dejaba mi vida para ir detrás de ti, tu habías dejado tu vida e ibas detrás de otra. Que tonta que fui, que tonta que soy; simplemente quería que seas feliz, hacía tus tareas, te ayudaba en los exámenes, me culpaba de tus errores y asumía la responsabilidad. Empeoraba lentamente mi vida, y mejoraba la tuya. Más tonta fui, cuando decidí que no importaba si vos no me agradecías por lo que hacía. Mi objetivo era que obtengas la felicidad, y lo logré, sin embargo no me di cuenta, de que yo no entraba en tu "proyecto feliz".
No sólo no apreciaste mi esfuerzo, sino, que también me alejaste de vos. Siempre busqué una excusa para acercarme, para estar cerca tuyo, para ayudarte, para justificar tus errores; creía que cuando los otros me decían "sos una boba, te estas dejando usar", se equivocaban.
En fin, cumplí mi meta y te hice feliz, dejé todo por vos. Pero no sólo fue eso, además, me convertí en una ilusa que pensó que la podías llegar a querer.

3 comentarios:

  1. Muy lindo blog !
    Te sigo, me sigues?
    Besos :)

    ResponderEliminar
  2. Ai, me siento re identificada. Me sentia una estupida al pensar que al dar todo por el, iva a hacer lo mismo el. pero me equivoque...
    Precioso blog linda, nos leeemos :)

    ResponderEliminar
  3. Te entiendo! a mi me pasó lo mismo, creía que si hacía todo por él, podía a llegar a quererme. Pero el tiempo y sus acciones me hicieron dar cuenta que no era así. Me encantó tu blooog. Te sigo.
    Un besito!

    ResponderEliminar

¡Libera tensiones y descargate!